Líneas que juegan en ella, giran, salen y entran.
Telas y paños que me acompañan.
Pliegues que evidencian mis formas desnudas.
Telas, que dondequiera, con líneas sinuosas y dulces,
asemejan tu piel, que me cubría sin vestirme,
mientras mis ojos se rendían al sueño nocturno.
Y sólo sábanas me rodean como abrazos hoy.
Y sólo pliegues como olas de mar, insinúan tu nombre,
como un papiro en una botella de cristal,
llegando a mis orillas.
Tu nombre, sin saber de dónde,
viene siempre para hacerme acordar,
de tu existencia.
YADART
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