sábado, 26 de abril de 2014
Sensibilidad - otro ángulo
Siempre tomé mi Sensibilidad como algo negativo, oscuro, como un factor de autodestrucción. Hoy intento usar otra perspectiva, otro ángulo con los mismos hechos.
Ahora así, con lágrimas en mis ojos por una película emotiva, considero aprovechar esta sensibilidad. Hacerla una virtud, porque quizás siempre lo fue.
Queriendo dedicar mi vida enteramente al arte, todos modos de arte, la sensibilidad es claramente un factor importantísimo, esa susceptibilidad a las personas, a las cosas, a los actos; expresarla, demostrarle al resto lo que no ven, expandirla para que se note, crearla de una manera sublime, para lograr llegar al fondo de esa persona, para que sienta lo que sentiste, cuando viste lo que no vio.
Quizás mi problema es que tengo demasiado amor para dar, y siempre lo concentro en un grupo reducido de personas; Y si realmente es así, tendría la responsabilidad extrema de propagarlo más, universalmente, a cada alma que pueda ser alcanzada, con pequeños actos, minúsculos, pero para mí trascendentes.
Encarando las mismas condiciones, con diferentes planes, voy a buscar las alternativas y los objetivos, para encontrar el mejor camino. Quizás sea arduo, capaz sea por momentos oscuro; Pero se que un camino que concluye en encontrarse a uno mismo, nunca puede sonar algo disparatado, es esencial, valioso y un riesgo que vale la pena correr. Una manera de encontrar eso que nos hace sentir incompletos, aunque puede sonar paradójico, se puede encontrar si entregamos nuestra parte del todo.
Es decir, a veces para encontrar la pieza que nos falta del rompecabezas, debemos perder todas las otras, si mi teoría tiene algún sentido, ellas al estar todas perdidas, en algún nivel, se encontrarían; Y si se encuentran, considerando que hablamos de las partes de uno mismo, seríamos nosotros, al fin completos, perdidos, encontrados, superiores.
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