"Yo te entrego mi corazón, y si eso no te parece suficiente,
yo no soy suficiente para vos."
OTH
Supongo que si tiene que ser va a ser. ¿Pero tenemos alguna garantía, algún seguro?
Quiero ser el ángel protector de alguien, el alma que es fuerte y frágil, que da y recibe.
Me encantaría tener tu mano en la mía, y saber que me vas a sostener si me caigo.
Con vos tengo la seguridad de que ser como soy no es malo, no necesito ser nadie más,
escucho la música que siempre me gustó, dibujo lo que siempre me gustó, y lloro en frente tuyo,
como siempre lloré en soledad. Y eso a su vez, me asusta demasiado, ¿Cómo volver atrás,
después de llorar en tu hombro? ¿Como seguir sin sentir tus pasos? ¿Cómo volver a sentir,
ese frío y esa oscuridad?
Es la primera vez en mi vida, que no sé si estoy enamorada, nunca estuve tan desconcertada,
sobre lo que el amor es. Porque somos los cimientos de un amor de a dos.
Una piedra vos, una yo, y vamos construyendo. Pero no sé, como colocar los ladrillos,
no se si formar una casita precaria o una enorme catedral. ¿Hasta donde crees que llegaremos?
¿Llegaremos muy muy lejos de acá o me vas a dejar en plena construcción?
No quiero ser una carga, una maldición, yo quiero hacerte sentir mejor, cuidarte.
Quiero que me cuides, que me abraces, que me digas que el mundo no se va a terminar mañana,
y que si se termina no me vas a soltar, que en un abismo obscuro aunque para salvarme tengas que volarlo,
lo vueles, y si no me podes salvar que caigas conmigo.
A veces pretendo demasiado, supongo. ¿Pero no es común? El deseo de seguridad, de un salvavidas,
de un par que te salve de vos misma. De alguien que te impulse a ser la mejor versión posible de vos.
No se si es amor, quizás solamente es soledad, quizás siempre fue soledad y querer eso,
importarle lo suficiente a alguien, a cualquiera, para que se acerque y diga, "Yo no te dejo sola".
¿Cómo vivir sin nunca haber escuchado estas palabras? y...
¿Como sobrevivir después, un día cuando quien decía esas palabras se marchó?
¿Que queda? Cenizas de una frase inspiradora y la ilusión de sentir que nunca fue cierta.
¿Cómo morir sin descubrir si sos merecedora de el amor de alguien, o si alguna vez lo fuiste y te perdiste en el camino?
No sé hasta donde llega mi propia fuerza, no se hasta que punto sobreviviré,
pero lo unico que puedo asegurar es que si muero,
algún día resucitaré.
No se como, si sola o acompañada,
pero la grandeza de mi alma no se resume en un otro, sino en nada más,
que en mi propio yo, en mi arte, en mi fe, en mis ideas, incorrompibles y libres,
que antes de ese día prefiero expresar y propagarlas más,
salvar al mundo, salvar a todos, salvar hasta a esas personas que no lograron,
no quisieron, o no pudieron salvarme a mí.
Salvar la bondad del mundo, la que se cree perdida. La que a veces veo en fugaces momentos,
entre la gente, en la calle.
Recordar que es bueno ser bueno y que lo contrario no existe, porque si uno se salva,
por hundir a otro, no tiene gracia ni sentido, y en realidad el otro es el reflejo de ese mismo,
que salva su cuerpo, sus estereotipos materiales, y hunde su alma;
y el día cuando su vida se termine, no hay alma que perdure.
Mi alma es conmocionada por tus acciones, para bien y para mal,
pero aún no tengo esa seguridad, para encomendarte protegerla.
Solo esperaré un poco más, a ver si obtengo la claridad,
que ambos andamos buscando.

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