sábado, 23 de enero de 2010


Mi corazón despertó otra vez, al escuchar su voz. Tanto tiempo estubo alli dentro, dormido, triste, extrañandolo. Pero cuando de pronto escuché su voz, sentí un tremendo golpe en mi pecho. Y sentí que volvi a vivir... a respirar... que mi corazón volvio de golpe a latir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario